martes, 8 de julio de 2014

Enciende una luz…

Dialogando en Familia
Enciende una luz…
*- Alejandro A. Artigas Núñez

           
            Enciende una luz, déjala brillar, la luz de Jesús, que brilla en todo lugar, no la puedes esconder, no la puedes callar, ante tal necesidad, enciende una luz en la oscuridad. Así dice la letra de una hermosa canción de nuestro hermano en Jesucristo Marcos Witt. Cuánta necesidad hay hoy en día de encender una luz. Hoy nos ocupamos más de estar quejándonos, y decimos que todo esto que está pasando es culpa de fulano, mengano, zutano, en fin, a cualquiera le echamos la culpa, le cargamos la responsabilidad a otra persona; bien sea a nuestros superiores, al papá gobierno, al mismo Dios incluso; hasta tal punto que quisiéramos tener la lámpara de Aladino y sólo con frotarla el genio saldría a resolver, mágicamente, todos los problemas, eso sería muy fácil, pero la realidad es otra. 
            Sin tan sólo encendiéramos una luz y dejáramos de maldecir la oscuridad, pensemos mejor en construir que destruir. Recordemos que por más oscura que sea la tormenta, volverá a brillar el Sol, porque siempre al final del túnel hay una luz, sólo sigámosla. Si en lugar de llevar quejas, lleváramos soluciones. En la letra musical que arriba mencionamos destaca la persona de Jesucristo, sí así como lo lee, se destaca al Unigénito Hijo de Dios, el Creador del Universo, y por ende de usted y de mí, y de todos. Él es el que nos anima a encender una luz y a no dejarnos dominar por la oscuridad.
            Es mi deseo que usted tome la segunda opción, encienda una luz y deje de estar maldiciendo la oscuridad, aportemos soluciones y no problemas. Mejor pensemos qué puedo hacer yo para revertir la situación, y no, qué pueden los demás hacer por mí. Qué cómo lo hacemos. En primer lugar dispongamos de un poco de tiempo para meditar en todas aquellas fortalezas que Dios nos ha regalado, las que tenemos a nuestro alrededor, en mi casa, familia, trabajo y comunidad. Pero tampoco descuidemos nuestras debilidades, porque también las hay; busquemos mejorarlas para así continuar construyendo este extraordinario y precioso Estado Barinas, y a esta linda Venezuela. De la misma manera debemos aprovechar las oportunidades que se nos presentan. Ese sería el primer paso. No dejemos para mañana lo que podemos hacer hoy.
            Como segundo paso, debemos poner en práctica todo lo, positivamente, que hemos aprendido en esta vida. Y esto lo digo porque en el devenir del tiempo se nos presentan, también, muchas cosas no muy constructivas y que no son útiles para nada, esas desechémoslas y sigamos el camino recto, deja brillar esa luz que Dios te ha dado, no escondas lo bueno y lo positivo que tienes para regalar al mundo que te rodea, no te quedes callado, aporta tus ideas, entrega soluciones, y así verás cuanto puedes hacer por ti, los tuyos, y tu prójimo.
            Si te toca empezar de nuevo, pues entonces, empieza de nuevo y no desmayes. Las Sagradas Escrituras nos enseñan que Dios quiere llenarnos de ricas y grandes bendiciones. Pero para saberlo, entenderlo, y encontrarlas, debemos ir a ellas. Allí encontramos las soluciones a todas nuestras necesidades y preocupaciones.

            Hoy en día existen muchas personas que quieren escuchar ideas, proyectos y orientaciones de personas tan especiales como usted, incluso quisieran seguirlas y hasta imitarlas. Así que pongamos nuestro empeño y organicemos los proyectos que están en nuestra mente y pongamos por obra a hacer realidad lo que tanto queremos, Dios está dispuesto a ayudarnos. Ánimo, no desmaye, y verá mañana un día mejor. Hasta una próxima oportunidad si Dios quiere.

Artículo de opinión publicado en el Diario LA NOTICIA de Barinas en la página 6 el jueves 22 de mayo de 2014

No hay comentarios:

Publicar un comentario